Un ciudadano boliviano que había sido expulsado del país el año pasado, permanece demorado en el destacamento 7 de Abril esperando que la Justicia Federal defina qué hacer con él.
En el marco del Operativo Lapacho, el lunes cerca del mediodía, personal de ese puesto fronterizo que está sobre la ruta 34 en el límite con Salta, detuvo un micro particular al sospechar que era un tour de compras. Al detectar que no llevaban mercadería de contrabando, en un trámite de rutina, decidieron controlar la identidad de los pasajeros. Después de haber realizado la consulta en la base de datos, los uniformados descubrieron que uno de ellos no podía estar en nuestro territorio, ya que habría sido expulsado por una causa vinculada a drogas.
Según pudo establecer LA GACETA, el sospechoso, que dijo ser electricista y costurero, fue detenido el año pasado en Jujuy acusado de trasladar casi tres kilos de cocaína en un ómnibus de línea.
Al hombre, de unos 40 años, se le dictó la prisión preventiva por transporte de droga. Nuestro diario no pudo conocer cuál es la situación de esta causa, pero sí se descartó que haya sido un reconocido narco del norte del país, tal como trascendió ayer.
El responsable del Operativo Lapacho, Fabio Ferreyra confirmó que funcionarios judiciales jujeños le ordenaron que mantengan en ese lugar al viajero demorado hasta tanto resuelvan qué hacer con él.
Sin calabozos
Al cierre de esta edición, no habían recibido ninguna instrucción, por lo que el hombre permanecía en el destacamento a la espera de novedades. Vale la pena aclarar que esa base no cuenta con calabozos y sólo tiene lugar para el descanso de los policías.
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